Santiago Torre, el base de Liniers, dialogó con el departamento de presenta del club sobre el inicio del torneo y los objetivos de esta temporada 2015.
– Comenzaron con tres victorias en igual cantidad de presentaciones, desde lo numérico el inicio es perfecto.
– En cuanto a resultados sí. Nos falta mucho para recuperar el nivel con el que terminamos jugando, especialmente en defensa donde comenzamos muy mal. Adelante sabemos que este año, más aún que el pasado, tenemos jugadores con mucha facilidad para anotar. Se sumó Agustín (Dottori) que fue el goleador del último torneo y también Facu (Goenaga) que es un jugador muy importante para la categoría, entonces sabemos que en ofensiva estamos tranquilos.
– Tuvieron complicaciones defensivas en los primeros tiempos, tras el descanso supieron corregir esos errores.
– Después del primer partido pensamos que eran los nervios del arranque, que esa podía ser nuestra peor versión (en defensa) y lo único que quedaba era mejorar. El primer tiempo con Alem también fue bastante malo, aunque mejoramos en el segundo, especialmente en el último cuarto. El otro día contra 9 de Julio, otra vez empezamos mal, pintaba para un partido de 90 puntos, pero en el segundo tiempo recuperamos el juego y lo recortamos a la mitad.
– ¿Qué tan importante es mantener la base del equipo de 2014 para poder corregir las cosas que no salen como quieren?
– Es uno de los pilares. Sé que es una frase hecha, pero de los grandes grupos salen grandes equipos. El año pasado terminamos jugando el 7/8 de Enero y nunca nadie se quejo, ni vino con mala cara, todo lo contrario. Por suerte nos pudimos quedar la mayoría de los jugadores salvo Facundo Barreto. Se sumaron dos pibes de 10, que son grandes jugadores y estamos tratando de insertarlos, de pulir los errores para ganar partidos y llegar bien entonados a la recta más importante.
– ¿Cuántas cosas cambiaron tras la llegada del nuevo entrenador?
– Quizás Piru (López) nos daba un poco más de libertades y Seba (Aleksoski) nos indica cómo hacer las cosas un poco más efusivas en defensa. Por momentos es muy positivo, porque hay momentos de partidos que nos perdemos y él, con un par de gritos o insultos, nos levanta.
Pero el equipo estaba armado, y más que nada él se tuvo que adaptar a nosotros que viceversa. Lo mismo había pasado con Piru que llegó cuando se fue Daniel Frola.
– ¿Cómo trabajan en la adaptación de Agustín Dottori? Teniendo en cuenta que es un jugador que toma muchas determinaciones y llega a un perímetro de por sí, muy ofensivo.
– En el momento que Agustín se sumó, nosotros asumimos que habíamos incorporado al goleador del torneo pasado. Entendimos que, especialmente a principio de temporada, los chicos que ya estábamos en el club íbamos a tener que resignar lanzamientos para que él se vaya adaptando. No es normal que se haya insertado tan bien. Pasó de jugar en un equipo donde tomaba 30 tiros por partido, a un equipo de punta donde el porcentaje es menor. Es muy importante que haya arrancado con tres juegos de 20 puntos.
– En lo personal, ¿Cómo arrancaste la temporada?
– Bien, estoy mejor físicamente comparándome con el inicio del 2014. Hicimos una pretemporada bárbara, el profe me hizo bajar 4/5 kilos (risas) y me siento más rápido. Por ahí me falta un poco de gimnasio pero eso se agarra con el ritmo de los días.
– ¿El cambio en el torneo te parece mejor?
– Me gusta el hecho que jugamos más veces contra todos. El torneo pasado hubo equipos que nos cruzamos solo dos veces. Con Villa Mitre nos cansamos de enfrentarnos, entre temporada regular y finales fueron como 10/12 partidos en el año.
En cuanto a las finales extra, nos benefició el año pasado, pero se enfrentaron los dos campeones del año y fuimos los justos vencedores. Ahora vamos a adaptarnos para pelearla hasta el final de la mejor manera.
– El armado del plantel indica que el objetivo es repetir el título.
– Si, mantuvimos la base del equipo campeón y reforzamos en puestos claves. Casi todos estuvimos el torneo pasado, pero más allá de haber ganado, nos quedó la cuenta pendiente de no poder festejar con la familia y los amigos. No sé de quién fue la culpa, no voy a hacer hincapié en eso, pero fue muy raro y no pudimos escuchar la chicharra del final y festejar en la cancha.
– ¿Cuánto juega en su cabeza el no haber podido tener el cierre que se merecían?
– Lo intentamos tomar de la mejor manera posible. Sabemos que tuvimos menos de un mes de vacaciones, pero vinimos con la idea de intentar volver a ser campeones y festejar.
– Por nombres propios, la lógica indica que Liniers y Villa Mitre son candidatos nuevamente. ¿Es así o hay otros equipos que se pueden meter en la discusión?
– En teoría si, tanto ellos como nosotros mantuvimos la base. Bahiense tendrá un buen plantel tras el Torneo Federal, más allá que se le van a ir algunos jugadores. Un caso similar es del de Olimpo. Veo bien a Estudiantes aunque tiene una rotación corta. El torneo ya mostró que cualquiera le gana a cualquiera, pero todo indica que ahí están los que van a pelear el título.
– Es tu cuarta temporada en Liniers. Se te ve muy bien más allá de no ser un jugador surgió del club.
– Estoy muy cómodo. Un hecho que lo demuestra es que el año pasado ascendió el club donde me crié y formé, y sin embargo decidí quedarme acá por el grupo, por el club y porque me tratan de 10. Más allá que mis primeras tres temporadas fueron de éxitos, jugamos siempre las finales, con 22/23 años tenía que ser un poco más “egoísta”, pensar en mí y querer jugar algo más importante. Ya sé que voy a tener tiempo para volver a Alem.
Torre en números
Hasta el momento el conductor “Chivo” promedia: 15.3 puntos (8.3% T3, 68.4% T2, 85% T1), 4.6 rebotes, 3 asistencias, 3.6 robos y 17 de valoración.
