Liniers venció como local a Olimpo por 73 a 72 y festejó tras dos derrotas consecutivas. En un primer tiempo de alto vuelo, el Chivo marcó diferencias gracias a su efectividad de larga distancia (10/15 T3), pero bajó su nivel para el ST (el partido también), el equipo de Maceratesi nunca se rindió y llegó a tiro al cierre. Morán (19, 7/11 TC) no pudo anotar el lanzamiento que le hubiese dado el triunfo al Aurinegro en la última posesión. El ganador tuvo a Gonzalo Martínez (21, 5/8 T3, 12 en el 1C) y Goenaga (14, 6/8 T2) como máximos exponentes, bien secundados por Pizzo (13) y Dottori (13). En la visita no alcanzó con lo hecho por Bettiga (15 + 11 rebotes, 7 en el 4C), Marcos Fernández (10) y Arens (10).
A puro gol, así fue el inicio de partido en el Sagasti donde Liniers entró con la mano caliente de larga distancia (4/4 T3) con G. Martínez (9, 3/3 T3) intratable más una bomba de Prado y el aporte de Goenaga en la pintura, para establecer diferencias (16-11 a 5.38) ante un Olimpo que sufría atrás pero encontraba variantes en ofensiva con Morán (5) a la cabeza y una clara apuesta de atacar el cesto. Con Dottori y Pizzo como facilitadores (5 asistencias entre ambos), el dueño de casa siguió teniendo mucha fluidez con Goenaga (terminó con 6) mostrándose más decidido y con G. Martínez (cerró con 12, 4/5 T3) decorando un gran pasaje con una jugada de triple y falta, pero los de Maceratesi no se quedaron atrás, Fernández (6) y Sánchez pisaron fuerte en la zona pintada, y los ingresos de Capponi (5) y Miguel (4) le dieron frescura al perímetro para que el “Aurinegro” devuelva el golpe y se lleve el primer cuarto 28 a 25.
Un doble de Miguel en la primer posesión, sería el único acierto de Olimpo en los primeros 5 minutos del segundo cuarto, peleado con el aro (1/8 TC), sin puntería detrás de 6.75 y con imprecisiones (3 pérdidas), los de Maceratesi lo pagaron en el otro costado porque Liniers volvió a tener otro pasaje soñado en ofensiva, volviendo a ser implacable de larga distancia (4/4 T3) y teniendo a Pizzo (8, 2/2 T3) como arma principal dentro de un gran movimiento de balón que también abastecía de buena manera a Dottori (5) y G. Martínez, el “Chivo” estableció un parcial de 20 a 2 que le dio 15 de luz (45-30) a falta de 5.11. Un par de fallos por parte del local le dieron aire al “Aurinegro” que con dos triples de Morán (6) y el intenso ingreso de Bettiga, marcó una racha de 8 a 0 que lo dejó a 7 (45-38 a 3.22) y mandó el mensaje que no estaba nada decidido. En ese pasaje final el nivel de aciertos bajó, Dottori (cerró con 8) se mantuvo decisivo en ataque pero el tándem Arens-Bettiga fue importante en ambos costados de la cancha para el visitante que se mantenía con vida, ya que camino a los vestuarios el dueño de casa ganaba 51 a 43.
Tras el descanso largo, el partido cambió por completo, las defensas comenzaron a prevalecer y el gran nivel ofensivo de ambos desapareció. Liniers apeló a lo que le había dado réditos en el inicio que era poner la bola cerca del cesto para que Goenaga (4) aproveche su experiencia, entendiendo que la efectividad de larga distancia ya no era la misma (0/5 T3 en el 3C), y Olimpo se sintió cómodo en ese contexto, Bettiga y Arens tomaban determinaciones y Morán conducía para que la distancia se acorte a 5 (57-52) en poco más de 5 minutos para un “Aurinegro” que se venía pero tenía que ver como el propio Morán tenía que ir al banco por problemas de faltas (tras cometer su tercera protestó y recibió una técnica). El trámite no cambió, el visitante apeló a arrestos individuales para mantenerse a tiro en el marcador y lo consiguió, más allá que Goenaga (cerró con 6) siguió siendo el más claro y G. Martínez (4) volvía al partido, esta vez atacando el cesto, para que el “Chivo” llegue al período final arriba por 6: 63-57.
Ya en el último cuarto el partido se volvió decididamente chato y los aciertos eran cada vez menos, y más importantes. El visitante estaba incómodo en ofensiva, tomando lanzamientos forzados y perdiendo balones, lo que hizo que anote solo 4 puntos en 5 minutos, y en el local volvieron los triples (Dottori y Pizzo) para que, con poco, la diferencia vuelva a ser de 10 (71-61 a 5.12) en la mitad del período. El “Chivo” comenzó a abusar del tiro de larga distancia (falló sus últimos 6 T3) y perdió la brújula con ataques estáticos y sin movimiento de pelota, lo que hizo que en definitiva anote solo dos puntos (doble de Goenaga) en esos 5 minutos finales; Olimpo, por su parte, tuvo a su abanderado en Bettiga (5) quién atacaba el cesto y se raspaba en ambos tableros, bien secundado por Arens y Fernández para que los de la Avenida Colon ingresen al minuto final solo 3 unidades abajo (73-70). Tras un par de errores, el dueño de casa tuvo la chance de liquidar la historia, pero Pizzo falló y en la contra le cometió una falta antideportiva a Morán que le dejaba la puerta abierta a falta de 17.3 segundos: el “Pollo” anotó ambos tiros libres (73-72) y tomó el control de la última bola, pero su tiro tras una penetración no fue acertado y Liniers respiró aliviado tras volver a sonreír luego de un par de derrotas consecutivas.
Síntesis | Primera División – Fecha #12
Liniers 73: Fernando Prado 7, Gonzalo Martínez 21, Agustín Dottori 13, Mariano Pizzo 13, Facundo Goenaga 14 (FI); Matías Martínez 2, Iván Petrini 2, Julián Marinsalta 1. DT: Sebastián Aleksoski.
Olimpo 72: Juan Pablo Morán 19, Facundo Arens 10, Emilio Giménez 0, Marcos Fernández 10, Agustín Sánchez 4 (FI); Franco Ruesga 0, Cristian Miguel 9, Valentín Bettiga 15, Lorenzo Capponi 5. DT: Franco Maceratesi.
Parciales: 25-28, 51-43 (26-15), 63-57 (12-14), 73-72 (10-15).
Árbitros: Horacio Sedán – Mauro Reyes.
Estadio: Hernán Sagasti (Liniers)
Dos bajas y media
A la ausencia de Santiago Torre (con un viaje ya programado), Liniers le tuvo que sumar la falta de Fabricio Starc quién tiene bronquitis. Por su parte, a falta de 8.31 minutos para finalizar el primer cuarto, Emilio Giménez tuvo que salir del partido por una molestia en el aductor de la pierna derecha y no volvió a ingresar en Olimpo.
Fuente: Gente de Basket